Quizás un resultado engañoso por lo visto en Mos el sábado. Las nuestras salieron al partido con una intensa presión, y fruto de ello, pronto nos pondríamos por delante 1-0. Incomprensiblemente, a partir de aqui, el Fisober comenzó a ganarnos con nuestra arma más peligrosa, el contraataque, con lo que consiguió remontar el partido y ponerse 1-3 al descanso.
A pesar de ello, nuestras chicas no arrojaron la toalla, y salieron decididas a meterse en el partido. Sin embargo los minutos transcurrían y el gol no llegaba. Las ocasiones llegaban en ambas porterías, y por fin a falta de 7 minutos llegó el 2-3 que nos metía de lleno en la lucha por los puntos. Y entonces, un minuto después llegaría la jugada clave del partido, un tiro al palo de Dama, que pudo empatar el partido, y que a la contra se convirtió en un desesperante 2-4. Cargadas de faltas, las nuestras se dieron por vencidas, quizás antes de tiempo, y entre dobles penaltys y dejadez, fueron cayendo tres goles más.
Una pena, ya que podría haber sido una jornada interesante, pero esto continúa y debemos seguir aprendiendo, ya que en esta Liga nadie perdona, del primero al último. El próximo sábado tendremos el último partido del año en la difícil pista del Mesón Río Ulla.
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